Tras haber celebrado recientemente sus 58 años de vida institucional y visionando desde ya sus 60, el Instituto Mayor Campesino -IMCA- de Guadalajara de Buga, tiene actualmente su apuesta por seguir, después de la pandemia.
“No todas las organizaciones sobrevivirán al impacto y dificultades que ha traído consigo la pandemia en el mundo, y por lo mismo, al celebrar los 58 años quisimos mostrar que estamos vivos y resistiendo para poder seguir con este proyecto tan útil para las comunidades de Guadalajara de Buga”, dijo con convicción y optimismo, Herminzul David Pabón, director del Instituto Mayor Campesino en la ciudad.
Además, destacó como logros: la formación de líderes al servicio de la comunidad, los procesos económicos y cooperativos y la formación de jóvenes sirviendo al campo, generando alternativas en medio de una reactivación económica que permita superar la crisis del Covid-19. El IMCA tiene previsto continuar con sus actividades de acompañamiento a las comunidades rurales con entregas de semillas y kits alimentarios, al igual que, sus campañas preventivas, de conservación del medio ambiente y la formación de productores para abastecer de alimentos a las ciudades y sostenibilidad de la región.
Algo fundamental para seguir adelante, es sumarse a iniciativas que contemplen el desarrollo de región como un todo, tal como se ha concebido a través de la Región de Planificación y Gestión, ya que, ello permite acercamientos con las administraciones municipales, con organizaciones e instituciones como la Cámara de Comercio, para apostarle a una planificación territorial, fortaleciendo planes de desarrollo en lo rural para que cada municipio sea un aliado para generar progreso y desarrollo; considera el Director del IMCA, al reafirmar la posición de continuar vinculada la institución a su cargo, en procesos valiosos de desarrollo regional.
Visionando la celebración de los 60 Años del Instituto Mayor Campesino, Herminzul David Pabón, “Mincho”, visualiza esa nueva década como una oportunidad para relanzarse, reactivarse y reforzar objetivos, con el fin de mantener viva su institución como espacio de formación económica, de consolidación de empresas solidarias y de fortalecimiento para la formación de campesinos y la producción agroecológica.
Sumado a esto, el IMCA buscará el mejoramiento de las condiciones y servicio del hotel, con una infraestructura que permita la adaptación de espacios para un mejor servicio de acuerdo a las nuevas medidas de bioseguridad. De esta manera esta entidad continuará fortaleciendo su red de servicios como institución ícono de la región.
