Un trágico accidente ocurrió en la madrugada de este 4 de enero en la vía que conecta Pasto con Mojarras, en Nariño, cuando una roca cayó sobre un autobús a la altura del peaje Cano. Aunque las autoridades no han confirmado la cifra exacta de lesionados, medios regionales han informado sobre el fallecimiento de al menos dos pasajeros. Este incidente ha generado conmoción en la región, donde los accidentes en carreteras principales han sido recurrentes en los últimos días.
El autobús afectado había partido desde El Cerrito, Valle del Cauca, con destino a Pasto. Los pasajeros, en su mayoría vecinos y amigos organizados para asistir al Carnaval de Blancos y Negros, se vieron sorprendidos por el desprendimiento de una roca que impactó de manera directa. El impacto dejó al vehículo seriamente dañado, mientras las autoridades y los equipos de rescate se desplazaron al lugar para atender la emergencia.
Este accidente se suma a otros recientes en las vías del sur del país. Apenas unos días antes, en la vía alterna a la Panamericana, entre Pasto e Ipiales, un bus afiliado a la empresa Turistur cayó por un abismo dejando 13 muertos y 29 heridos. Este siniestro, ocurrido en el sector conocido como El Placer, evidenció el estado crítico de algunas rutas y la necesidad de mayor mantenimiento e intervención para prevenir tragedias similares.
Al mismo tiempo, en otra vía principal del país, un autobús de la empresa Rápido Ochoa se accidentó en la autopista Medellín-Bogotá. En este caso, tres personas murieron y 39 resultaron heridas, mientras las ambulancias de municipios cercanos trasladaban a las víctimas a hospitales en San Francisco, Granada y Cocorná. Este evento también generó una amplia movilización de recursos médicos y de emergencia, subrayando los riesgos que enfrentan los pasajeros en las carreteras colombianas.
En medio de estas tragedias, las autoridades insisten en redoblar esfuerzos para garantizar la seguridad vial y mejorar la capacidad de reacción para poder atender con prontitud las emergencias. Las investigaciones sobre el accidente en Nariño aún están en curso, mientras las familias de las víctimas esperan respuestas y apoyo en este difícil momento.
