Este habitante de la calle priorizó dar de comer a su mascota, antes que él mismo, al momento de recibir un paquete de siete panes.
El negro canino acompañante de este hombre, después de haber comido dos de los panes, “se detuvo” a esperar que su dueño también comiera y, “al asegurarse” que guardó tres, volvieron a acomodarse para seguir su descanso en la esquina de calle cuarta con carrera 19 (Colpensiones) en Guadalajara de Buga.
Muy probablemente más tarde o, quizá mañana temprano, ambos compartirán los tres pancitos que se reservaron, para su “jornada de calle” del jueves 4 de agosto en la ciudad.